¿Por qué el sector teatral siempre va por detrás del cinematográfico?

Ana Pastor durante su entrevista al ministro Wert. / Foto: http://ecoteuve.eleconomista.es/

Anteayer, en la entrevista que Ana Pastor realizó al ministro Wert en La Sexta, me llamó la atención una pregunta de la periodista: "¿Va a bajar el IVA del 21% al cine?". ¿Al cine? ¿Y qué pasa con el resto de disciplinas que componen el sector cultural? Y es que gran parte de la población equipara la Cultura únicamente con el cine. ¿De quién es la culpa?

Pues la culpa, o la responsabilidad, es únicamente del mundo de las artes escénicas, que siempre va a rebufo de su hermano mayor de la gran pantalla. El teatro, la danza, el circo, los musicales, etc. nunca han sabido hacer valer su papel como industria cultural. Sí, ya sé que engloban a menos gente, o con menos poder económico y/o mediático, que el séptimo arte, pero también es significativo que mientras el cine cuenta con la unión y la visibilidad que le proporcionan su Academia y sus correspondientes premios Goya, las artes escénicas se reparten en multitud de asociaciones empresariales completamente independientes y hasta sus galardones más emblemáticos, los Max, los otorga una institución externa como es la SGAE.

Un ejemplo de esa sensación de perrillo faldero que desprende el sector escénico: tras el éxito de la última edición de "La fiesta del cine", las distribuidoras cinematográficas han anunciado a bombo y platillo la iniciativa "Los miércoles al cine", por la que los ciudadanos podrán acceder el tercer día de las semanas comprendidas entre el 15 de enero y el 15 de abril a las 306 salas adheridas a la campaña, a cualquier película y sesión, por el módico precio de 3,9 euros. ¿A qué esperan los teatros para hacer algo parecido? Ya que prefieren quejarse en vez de invertir en creatividad empresarial, al menos que se dediquen a copiar lo que parece que triunfa en otros ámbitos de la Cultura.